lunes, 9 de diciembre de 2019

Aprendiendo sobre comunicación científica (10): entrevista a Lluis Montoliu

Nueva tarea para el máster, ésta muy entretenida y gratificante. Entrevisto a Lluis Montoliu, más de 10 años después de hacerlo por primera vez (en Diario Médico), para la asignatura Introducción a la Comunicación Científica.
Si alguien llega al blog, seguro que esta entrada se lee más que las anteriores ;)

Aviso porsiaca: ya que se trata de un ejercicio de carácter formativo/docente, y se incluye en un blog personal, se agradece la no reproducción de esta entrevista en medios, webs, etc. Por supuesto, sí se puede difundir y citar con el enlace a esta entrada del blog, ya que su contenido es público. Tanto Lluis como yo estaremos encantados de su difusión en este sentido.

Mi consejo a los científicos jóvenes es: primero investiga, luego divulga”


Lluis Montoliu lleva 23 años trabajando en el Centro Nacional de Biotecnología (CNB), centro que pertenece al Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), el mayor organismo público de investigación de España. También desarrolla su labor en el CIBER de Enfermedades raras (CIBERER) y en la Universidad Autónoma de Madrid. Es biólogo, comenzó trabajando en genética de plantas y ha dedicado la mayor parte de su carrera al estudio de la genética en ratones, investigando sobre herramientas como la transgénesis y el origen biológico de diversas enfermedades raras. Experto en técnicas de edición genética como CRISPR, siempre ha estado interesado en la comunicación y la divulgación, tareas que ha potenciado en la última década hasta convertirlas en una parte fundamental de su trabajo científico actual.

La entrevista, que es más una charla distendida, tiene lugar en su pequeño despacho del CNB, en uno de los pocos días que el investigador trabaja frente a su ordenador. Congresos científicos nacionales e internacionales, clases en la universidad, charlas divulgativas en colegios y actividades con asociaciones de pacientes ocupan buena parte de su día a día. Tras muchos años formando científicos y consolidando conocimientos, Montoliu puede ahora apoyarse en su equipo, en el que tiene absoluta confianza, y dedicar más tiempo a llegar a la sociedad. Entre otros muchos ejemplos, forma parte de la iniciativa Naukas y es socio de la Asociación de Comunicadores de Biotecnología (ComunicaBiotec). Su consejo es claro: “Primero investiga, después divulga”.

Un momento de la entrevista con Lluis Montoliu.


¿Cómo y cuándo te entró el gusanillo de la divulgación científica?

Siempre me ha gustado contar las cosas. Desde que empecé a trabajar en el CNB, hace 23 años, comencé a colaborar con medios de comunicación, aunque al principio de forma anecdótica. El punto de inflexión en mis actividades de comunicación y divulgación se produjo cuando empecé a colaborar con asociaciones de pacientes y me impliqué en los programas de formación de profesores de enseñanza secundaria de la Comunidad de Madrid. Ambas cosas me abrieron la puerta a explicar con otro lenguaje lo que hacíamos en el laboratorio. Me encanta y lo considero gratificante.

¿Qué canales prefieres para divulgar?

Me siento cómodo hablando. Me gustan las charlas, pero llegas a un público limitado. Las redes sociales amplían el horizonte; Twitteres mi preferida, una herramienta esencial para mí que me ha hecho cambiar mi seguimiento de trabajos científicos, además de mi labor en divulgación. Hay más medios y, por ejemplo, considero muy relevante el uso de vídeos.

Hay un boom de la divulgación científica. ¿Crees que realmente llega a la sociedad?

En muchas de las actividades que hacemos los divulgadores hay un grupo de personas, muy interesadas en ciencia y en el movimiento divulgativo, que se repite. Estamos llegando a una parte de la sociedad a la cual no llegábamos, pero no tengo claro que vayamos más allá; nos queda mucho por hacer y explorar. Como se dice de Mahoma, hay que ir a la montaña, a sitios donde la ciencia no está, y por ejemplo los institutos de secundaria son una muy buena diana. Creo que los alumnos de 4º de ESO [14-15 años] son ideales para conectar y lograr que, no todos pero sí alguno, desarrollen más interés por la ciencia.


"Si uno tiene el privilegio de tener  
conocimientos científicos, también  
tiene el deber de compartirlos"

¿Crees que ha cambiado en los últimos años el apoyo institucional a la divulgación científica?

Definitivamente sí. Las instituciones se han dado cuenta de que para medir el impacto de lo que hacen sus investigadores, comunicarlo y llegar a la sociedad les reporta muchos beneficios. Cada vez se promociona más la ciencia desde las instituciones que la hacen. Además, la divulgación está empezando a formar parte de las actividades por las que se evalúa a un científico. En el CSIC, donde yo trabajo, se me evalúa también por mis labores de divulgación. El último sexenio tecnológico puesto en marcha por el Ministerio de Ciencia, que está ahora en evaluación, incluye como aspecto clave las actividades de divulgación.

Comunicar y divulgar ciencia ¿debe ser una obligación para un científico, o sólo una recomendación?

Para mí es una necesidad, especialmente cuando uno trabaja en un centro público de investigación. Si uno tiene el privilegio de tener conocimientos científicos, tiene el deber de compartirlos. Pero recalco que cada uno debe compartir lo que sabe, no debe divulgar de lo que no sabe por el mero hecho de ser científico. No estamos capacitados para hablar de cualquier tema.


"Hay que contar la ciencia de forma honesta, 
explicando muy claro qué podemos hacer hoy día 
y qué no podemos, o no debemos, hacer aún"


¿Cuál es la relación entre la divulgación de la ciencia y la educación científica que tiene la sociedad?

Según el informe PISA no funcionamos muy bien en ciencia. También lleva años señalándolo la FECYT en sus encuestas sobre percepción social de la ciencia. Hay gente que sigue creyendo en las pseudociencias, por ejemplo, y son los profesionales quienes debemos luchar contra estas creencias. Por ejemplo, en terapia génica, se leen titulares que llevan a pensar que ya está disponible para casi todas las enfermedades y pacientes. Ya me gustaría que fuera así, pero no lo es. Hay que contar la ciencia de forma honesta. Cada vez tengo más relación con asociaciones de pacientes y siempre les explico muy claro qué podemos hacer hoy día y qué no podemos o no debemos todavía hacer.

¿Algún consejo o recomendación para los científicos jóvenes que quieren divulgar ciencia?

Muchos investigadores jóvenes se me acercan y me dicen ‘quiero ser como tú y divulgar’, y siempre les doy el mismo consejo: primero investiga y luego divulga. Creo que hay que divulgar, pero desde el conocimiento. Llevo 23 años trabajando en el CNB, con mucha gente que ha pasado por el laboratorio, y he acumulado con mis equipos mucho conocimiento que ahora podemos llevar a la sociedad. Pero antes hay que acumular este conocimiento. Puedes divulgar sobre el trabajo de otros, pero es más informar, comunicar… Si realmente quiere trasladar un mensaje a la sociedad, tienes que divulgar sobre lo que tú haces. Hay que tener en cuenta que, para sentirte cómodo en esta labor, primero hay que desarrollar mucho trabajo. La divulgación es una actividad natural que llega en su momento, después de haber invertido tiempo y trabajo suficiente en el tema de investigación que te ocupa.



PD: aprovecho y dejo otra entrevista que le hice a Lluis a principios de año, cuando trabajaba en Diario Médico:

- "CRISPR es poderoso y peligroso, puede ser bueno y malo, y su límite es sólo la imaginación"

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